Nuevo curso político en Francia y nueva 'polémica personal' en el seno del gobierno galo. Como Sarkozy y su mujer o anteriormente Segonèle Royal no pueden ser siempre el objeto de las cámaras de los 'paparazzi', la ministra de Justicia, Rachida Dati les ha sustituido en las portadas de las revistas del país vecino.

La polémica surgió cuando la habitualmente delgadísima y soltera ministra de 42 años volvió de vacaciones con un vientre pronunciado que podría indicar que está embarazada. Al principio la política respondía "mi vida personal es mi vida personal" al ser preguntada por los periodistas, pero, según Le Monde, Dati ya ha reconocido que está en cinta.

"Quiero ser prudente, porque todavía no está consolidado. Estoy todavía en un período de riesgo. Tengo 42 años", explicó Dati, que "siempre" ha dicho que "era fundamental" para ella tener un hijo. Sin embargo, sigue siendo una duda quién es el padre de la criatura. La ministra no quiso revelar la identidad del padre. "Tengo una vida privada complicada" y "no diré nada sobre eso", se limitó a decir. Las quinielas sobre quién puede ser el padre ya se han disparado en Francia. Algunos medios apuntan a un rico viudo de 64 años, patrón de un grupo de hoteles y casinos.

Rachida Dati proviene de una familia musulmana de origen humilde pero educada en un colegio católico. Trabajó como vendedora ambulante y enferemera para financiarse los estudios y después, con el apoyo de influyentes personajes, lanzó su carrera hasta la judicatura. Dos de sus doce hermanos fueron detenidos y procesados por tráfico de drogas siendo ella Ministra de Justicia.