La noticia, conocida recientemente y de la que dan cuenta hoy todos los medios locales, saltó a la luz tras la denuncia hecha por la bisabuela de la niña, Vivien Yaakov, al Consejo Nacional del Menor, alertando de la desaparición de la menor.

La imagen de la pequeña, Rose Pizem, nacida en París y desaparecida en el mes de mayo fue publicada esta semana por los medios israelíes después de que la policía pidiera a la población que comunicara cualquier información sobre su suerte. Después de que fuera levantado el secreto de sumario el martes, los israelíes han conocido hoy que la policía sospecha del abuelo paterno de Rose, Ronny Ron de 45 años, un taxista actualmente en el paro, como autor de la muerte de la niña.

Ron habría confesado haberla matado e introducido en una maleta, antes de arrojarla al río Yarkón de Tel Aviv, aunque anteriormente dio otros testimonios que la policía no creyó ciertos. Mientras prosigue la búsqueda de la niña en las inmediaciones de una zona donde el abuelo aseguró haberla arrojado al río, las sospechas también se centran en la madre de la menor.

La madre, sospechosa

Se trata de Marie-Charlotte Renault, quien no denunció la desaparición de la niña, y que aparentemente no volvió a preguntar a su pareja por ella, después de que éste le comentara que la había enviado a una institución francesa supuestamente tras cometer el crimen. Los padres de la menor, de nacionalidad francesa, se casaron antes de cumplir los veinte en Francia, donde nació la pequeña.

La pareja visitó Israel, donde la madre de Rose conoció a su suegro israelí del que se enamoró, razón por la que decidió abandonar al padre de la pequeña para quedarse a vivir en este país. La pequeña regresó entonces con su padre a Francia, aunque tras conocer la madre que su ex pareja descuidaba la educación de Rose, e incluso ésta podría haber sido víctima de abusos, logró obtener la custodia de su pequeña, que se trasladó a vivir con ella y su abuelo a Israel en diciembre pasado.

Según revelan los medios, la pequeña tenía dificultades para comunicarse con su nueva familia, a la que no conocía, y mostraba problemas de comportamiento, como defecarse encima o golpearse la cabeza contra la pared, así como de lenguaje. El abogado de su abuelo Ron dijo a la prensa que mató a Rose en un ataque de furia cuando regresaba de recogerla de casa de su madre, Vivien Yaakov, con la que había discutido porque ésta le reprochó que no podía hacerse cargo de la menor durante largas temporadas.