Modificar el ángulo de la matrícula o colocar bombillas de alta intensidad, cuyo reflejo dificulta la lectura de los caracteres, son algunos de los nuevos trucos para eludir los radares que ha detectado la Policía Municipal de Madrid .
Según la Policía Municipal de la capital, los conductores de motocicletas, un tipo de vehículo cuyo uso se multiplica en la etapa veraniega, actualizan constantemente el modo de evadir los controles de velocidad, lo que
complica la labor de los agentes encargados del cumplimiento de las normas de circulación y los límites de velocidad.
Aunque los hay que todavía acuden al rudimentario procedimiento de colocar un pañuelo en el borde de la matrícula de manera que el movimiento los haga ondear y tape la placa de matrícula y aún
hay quien coloca la cadena antirrobo justo sobre los caracteres, la Policía Municipal no para de descubrir nuevos trucos.
Entre los últimos están el que hace variar el ángulo de la placa de matrícula con una varilla situada en el manillar del vehículo o, simplemente, con un palomilla en la placa porta matrícula, y la
sustitución de las bombillas de iluminación originales por otras de alta intensidad que dificulta con su mayor reflejo la lectura de la matrícula.
Más elaborado es el que consiste en colocar un motor eléctrico que se activa con un pulsador accesible al piloto que oculta totalmente la placa.
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