La celebración del título de Campeones de Europa fue emotiva. Con Cesc por delante de sus compañeros, guiado por Ángel María Villar, todos subieron la escalera hacia el palco, donde se encontraba la ansiada copa.

Todo comenzaba con el manteo a Luis Aragonés y todos los jugadores haciendo una piña. Con la alegría de la victoria, uno a uno fueron pasando ante Michele Platini, que otorgaba las medallas. Primero, Villar, seguido de Cesc, Iniesta, Xabi Alonso y David Silva.

Tras el asturiano, coronó la escalinata Sergio Ramos, vestido con la camiseta de Antonio Puerta, y claramente emocionado.

Le siguieron Cazorla, Sergio García, Capdevilla, Reina y Marcos Senna, uno de los importantes de este equipo, que posaba con una bufanda del Villarreal en la cintura.

Después, Güiza, Marchena, Albiol, Fernando Navarro y Andrés Palop. El tercer portero de la selección lució la camiseta de Arconada, el mítico portero que se quedó a las puertas de lograr el título continental en 1984.

Los últimos en llegar fueron Xavi, De la Red, Arbeloa, Villa y Fernando Torres, que se abrazó con Su Majestad el Rey Don Juan Carlos, al igual que haría Luis Aragonés, tras Puyol, que charló con el Rey.

Finalmente Casillas, el verdadero héroe de la selección, levantó la copa con la consiguiente euforia, y besó y abrazó a los monarcas.

España, Campeona de Europa.