El cirujano valenciano Pedro Cavadas y su equipo están ultimando el papeleo para poder hacer un trasplante de cara en el hospital la Fe de Valencia. Ya tienen dos candidatos a recibirlo: un hombre y una mujer de fuera de Valencia. Uno sufre una enfermedad y otro, quemaduras.

No obstante, Pedro Cavadas, que se resiste a dar detalles para preservar el anonimato de receptores y donantes, aclara: "Seguimos evaluando a pacientes para incluirlos en la lista".

Cavadas confía en poder empezar a buscar un donante "en unos meses" aunque reconoce que es especialmente complicado porque en España no hay precedentes (en Francia, sí) y porque no es como donar un riñón, un corazón o cualquier otro órgano que no se ve.

Con todo, el trasplante será parcial, "de un segmento" del rostro, parecido al que le hicieron los galenos franceses a Isabelle Dinoire, mordida por su perro.

Eso sí, han tenido que pasar 19 meses desde la intervención y una rehabilitación diaria "muy dura", en palabras de la propia Alba, quien tendrá que seguir medicándose toda la vida para evitar el rechazo. Sin embargop, dice: "Ha valido la pena y volvería a hacerlo, mis manos son como mis hijas", explica la mujer que, pese al alta, sigue haciendo ejercicio en casa: "Además de los quehaceres del hogar, hago estiramientos y flexiono los brazos", cuenta. Su próximo reto, que se antoja más asequible, "encontrar trabajo de lo que sea".

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