¿Cuál es el primer recuerdo que tiene de Madrid?

Una guardería de Moratalaz, el primer barrio en el que viví. Me impresionaba mucho cuando los niños se tumbaban y la maestra dibujaba su silueta. Un poco como lo que hacen los policías en las series americanas. Es un recuerdo de interior.

La mejor banda sonora para disfrutar de la ciudad es...

Joaquín Sabina. Como cronista callejero, nadie le gana.

Cuando cierra los ojos y piensa en la capital, ve...

La Cibeles iluminada de noche.

¿Qué época del año le sienta mejor a la ciudad?

El Madrid caluroso, el del asfalto ardiente. Es duro, pero con las terracitas de la Castellana y esas noches claras en las que los cubatas sientan tan bien, se puede sobrevivir. Soy masoca.

¿A qué huele Madrid?

A polución, a pasta, a libertad.

¿A qué sabe?

A whisky con cocacola.

Las mejores vistas de toda la región están en...

En el puerto de los Leones, en la sierra de Guadarrama, según se vuelve. Hay una panorámica bestial sobre nuestro pequeño país.

Una excursión que todo el mundo debería hacer...

Al estadio Santiago Bernabéu.

Ama Madrid...

Pese a todo y con pasión.

Pero le desquicia...

Porque es la ciudad de mi adolescencia y de mi juventud. Supongo que guarda muchos recuerdos vergonzosos.

¿Cuál fue su último viaje en Metro?

Ayer. De Colonia Jardín hasta Plaza de España.

¿Qué edificio madrileño no se cansa de admirar?

La torre Picasso. Es de una sencillez maravillosa y de una hermosura absoluta. Los japoneses tienen un sentido de la estética refinada que los europeos jamás igualaremos.

Tómese un desayuno castizo: ¿con churros o porras?

Las porras.

¿En qué lugar de la comunidad le gustaría que esparcieran sus cenizas?

En cualquier rinconcito del parque del Guadarrama. A la sombra de una encina.

BIO: Nació en Madrid en 1971. Sus novelas más famosas son Mensaka e Historias del Kronen. Ahora publica La pella.