Según informaron fuentes del Instituto Armado los agentes de la Patrulla de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Fabero que prestaban servicio de vigilancia de la caza por los montes de Salentinos, concretamente en un praderío denominado Las Salgadinas, observaron sobre las 00.05 horas un vehículo todoterreno que circulaba por la carretera, bajo una intensa lluvia y que iluminaba con "un potente haz de luz" los prados ubicados entre el río y la carretera que une las localidades de Páramo del Sil con Salentinos.

Minutos más tarde, escucharon un disparo y observaron cómo una persona se bajó del vehículo y recogió de los prados un ejemplar de corzo que introdujo en el mismo. Una vez interceptado el vehículo, los agentes encontraron en el asiento delantero un rifle cargado y dispuesto para su uso con un foco adosado y en la parte posterior, una pieza abatida de corzo macho, tapada con una manta.

Pensó que era un jabalí

Igualmente, identificaron al conductor y único ocupante del Land Rover, F.B.F, de 50 años, natural y vecino de Villablino, quien explicó a los agentes que sufría daños de los jabalíes en los prados y que había matado al corzo "pensando que se trataba de un jabalí".

Según las mismas fuentes, dicha conducta constituye diversas infracciones tanto de la legislación sobre armas como a la Ley de Caza, que han sido puestas en conocimiento de las autoridades correspondientes, a cuya disposición quedan el arma y foco intervenidos, mientras que el cuerpo del corzo ha sido entregado para su aprovechamiento en un centro de acogida de la localidad de Fabero.

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