SARE, especializada en el rescate de personas en situación de emergencia, ha lamentado este miércoles que las autoridades chinas no les permitan entrar en el país para ayudar a salvar vidas tras el

terremoto sufrido el pasado lunes.

Según los últimos datos oficiales,

la cifra de muertos en la provincia de Sichuan, donde tuvo lugar el epicentro del seísmo, se eleva a 14.866, mientras que

al menos 40.000 personas están sepultadas o desaparecidas. No obstante, otras cifras hablan de al menos 20.000 muertos.

El presidente de SARE, Roberto Rubio, ha indicado que sus

equipos operativos y unidades caninas de rescate podrían servir de mucha ayuda al pueblo chino, por lo que ha reiterado su disponibilidad a colaborar en cualquier momento, tanto en China, como en Birmania, país este último que sufre una

crisis humanitaria provocada por el paso del ciclón "Nargis".

La ONG, compuesta por profesionales ligados al sector de las emergencias, como sanitarios, bomberos y guías de rescate caninos, ha participado hoy en la reunión de coordinación que la AECID ha mantenido este mediodía con los actores humanitarios españoles para hacer

balance de la situación de emergencia, tanto en China como en Birmania, y de las posibles respuestas a ambas crisis humanitarias.

El Gobierno español, a través de la

Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), ha anunciado hoy una

contribución de un millón de euros a destinado a los damnificados por el terremoto en China.