A los adolescentes madrileños les interesa el sexo y cada vez lo practican antes. Los jóvenes de la región tienen sus primeras relaciones sexuales completas, de media, a los 16 años. En los últimos cinco años, la edad en la que los chicos pierden la virginidad se ha adelantado. Si en 2003 se estrenaban a los 17, ahora lo hacen un año antes, según datos del Centro Joven de Anticoncepción y Sexualidad.

Aunque el primer coito lo tienen a los 16, «los besos, las caricias y las masturbaciones mutuas comienzan dos años antes: a los 14», explica Ana García, coordinadora del Centro Joven de San Vicente Ferrer, 86. El descubrimiento del propio cuerpo «comienza mucho antes, pero no se suele recordar».

En casa de los padres

Parte de la ‘culpa´ de que el primer encuentro sexual no sea del todo redondo se debe a que suelen acostarse en la casa de los padres cuando éstos no están, o en las de amigos, y casi siempre «en fiestas, cuando hay más gente en la vivienda, lo que hace que el miedo a ser descubiertos les genere tensión». Los adolescentes no pueden recurrir al coche porque al ser menores de edad no tienen carné.

Las noches del fin de semana son sus preferidas para tener relaciones. Para protegerse durante el acto «usan preservativo o la marcha atrás», indican desde el Centro Joven de Anticoncepción. Esto supone que «asumen el riesgo al embarazo porque es lo que más les preocupa, pero no son conscientes de las enfermedades que pueden contraer».

Pese a que el primer encuentro sexual no es muy satisfactorio, «lo suelen recordar con cariño y con humor porque por regla general ponen muchas expectativas y, una vez que pasa, lo desmitifican», apunta García.