En la actualidad se asiste a un declive generalizado de las poblaciones de anfibios y reptiles. Las causas de esta disminución están relacionadas principalmente con la progresiva transformación de los hábitats naturales, con el abandono de los cultivos tradicionales y el aumento de los cultivos intensivos y con los incendios.

Por otra parte, a estos problemas se une la animadversión que tradicionalmente sienten muchas personas por tales animales. Desde tiempo inmemorial tanto los anfibios como los reptiles han sido considerados como seres repugnantes merecedores de morir bajo el zapato o el azadón. Además, les acompañan multitud de leyendas sobre su supuesta peligrosidad para el hombre y falsas creencias sobre su biología y comportamiento.

Por otra parte, los anfibios son uno de los grupos animales más amenazados por el cambio climático por su morfología y los lugares donde habitan. Por este motivo son excelentes bioindicadores de la evolución de dicho grave problema ambiental.

La diversidad de especies de anfibios y reptiles en la Región de Murcia es muy elevada, especialmente de estos últimos, ya que los anfibios necesitan hábitats acuáticos para reproducirse y en la Región este tipo de medios, como es bien sabido, son muy escasos. En nuestra Región habitan once especies de anfibios, que incluyen salamandras, ranas y sapos, un galápago, una tortuga terrestre, la apreciada tortuga mora, dos salamanquesas, una culebrilla ciega, cuatro lagartijas, un lagarto, un eslizón, siete culebras y una víbora.