4 Rosas, el nuevo álbum de Diana Navarro, es un trabajo mucho más que una continuación del primero. Es un salto geométrico al éxito.

Diana ha vuelto a contar con sus colaboradores Manuel Illán y Chico Valdivia en la producción y la composición, asistidos por Miguel Ángel Collado, arreglista; las letras de Luis Gómez Escolar y los oídos del técnico de sonido, Bori Alarcón.

24 Rosas nos trae a una artista crecida, mucho más grande, segura y entusiasmada de sus canciones y de sus sentimientos. Hace algo más de dos años que la cantante malagueña nos sorprendió con la canción Sola, de su primer disco, titulado No te olvides de mí.

En todos sus trabajos, Diana Navarro combina a la perfección géneros como la copla de nuevo siglo, hermanada con la ópera de la legendaria Maria Callas y la new age de Enya, el fado portugués y el folclore mediterráneo, la melodía norteafricana, el influjo oriental y, por supuesto, el flamenco. Todo ello, inspirado en experiencias personales.

Un trabajo muy vitalista

24 Rosas va más allá del lamento, del quejío que tanto nos conmocionó en el primer disco. La cantante afirma que «es bueno, que es muy sano llorar las penas, pero que luego hay que entrar en acción. Este disco es vitalista, para gente con alma, que tira para adelante». El primer single, Mira lo que te has perdío es un ejemplo directo que va al corazón y al buen sentido