El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, ha dado este miércoles un ultimátum a la milicia Ejército del Mahdi del clérigo chií Muqtada Al Sadr para que abandone las armas en 72 horas, si no quieren que se les apliquen "graves castigos".

En un comunicado leído en la televisión estatal iraquí, el primer ministro apuntó que "aquellos que fueron engañados para levantarse en armas deberían rendirse y comprometerse por escrito a que no volverán a hacerlo".

Al menos veinte personas han muerto este miércoles y 115 han resultado heridas en enfrentamientos ocurridos en el barrio bagdadí de Ciudad Sadr entre el Ejército iraquí y la milicia Ejército del Mahdi del clérigo chií Muqtada Al Sadr, según han informado fuentes policiales.

Este martes, una fuente policial confesó que sobre Basora había "grandes columnas de humo negro que se pueden observar desde distintas partes" y que se podían "escuchar los tiroteos por toda la ciudad".

Nueva jornada sangrienta

Por otra parte, en la localidad Amara, 350 kilómetros al de sur Bagdad, al menos cinco militares iraquíes han muerto y 8 vehículos blindados han sido incendiados en una emboscada contra una patrulla tendida por un grupo armado, que podría estar relacionado con la milicia de Al Sadr.

Mientras tanto, en Duluiya, 90 kilómetros al norte de Bagdad, al menos 40 supuestos insurgentes han muerto y decenas han resultado heridos en un bombardeo aéreo estadounidense, según ha informado la agencia de noticias independiente Asuat al Iraq.

Además, un soldado estadounidense murió este martes en combate en Bagdad, con lo que el número de militares de Estados Unidos fallecidos en Irak desde la invasión del país en 2003 asciende ya a 4.001, según ha informado el mando norteamericano.