Para que un viaje en crucero sea todo un fracaso no es preciso que el barco naufrague. Basta con que no responda a las expectativas o con que no cumpla el itinerario.

Partiendo de estas premisas resulta comprensible que los pasajeros del crucero Sky Wonder se sientan defraudados. Habían contratado con Pullmantur un itinerario que consistía en volar desde España hasta Atenas el día 16, donde ya en el barco visitarían Patmos, Rodas, Bodrum y Kusadasi, para atracar en Estambul el día 22 y volver a España tras una pequeña visita a la ciudad.

Sin embargo, el segundo día los pasajeros no vieron Patmos, tal y como estaba previsto. El barco no atracó excusándose en el mal tiempo, lo que provocó las airadas protestas de los pasajeros, que consideraban que apenas había olas, según publica El País.

El día 19 el Sky Wonder sí atracó en Rodas, y un día después los pasajeros visitaron Bodrum, aunque no marcharon de la localidad a las siete de la tarde, como estaba previsto, sino a la mañana siguiente. Ese día, el barco tampoco atracó en Kusadasi. Por los altavoces se anunció que el mal tiempo impedía visitar la ciudad, una vez más.

La tangana estaba servida. Los pasajeros, que habían abonado entre 900 y 2.000 euros por cabeza, aseguran que el mar estaba en calma y que pidieron, indignados, las hojas de reclamaciones, pero no había suficientes, según la empresa.

"Mal tiempo y fuertes vientos"

El capitán, que compareció tarde a juicio de los turistas, se negó a explicar nada y fue increpado, siempre según la versión de los pasajeros, que han creado una web a su vuelta a España para centralizar las quejas y han contratado a un abogado, con intención de presentar una demanda contra Pullmantur.

La empresa alega en un comunicado que la cancelación de las escalas se debió "al mal tiempo y a los vientos fuertes de hasta 140 kilómetros por hora" que sufrieron las zonas.