Azotes muy reales y una crucifixión muy verídica e impresionante es como definen los que la han visto esta escenificación, en la que Jesús se cae hasta tres veces con la cruz a cuestas y en la que participan unos 150 vecinos con escenas dialogadas introducidas por un narrador.

Además del alcalde, también interviene el párroco actual del pueblo y sucesor de Torres, José María Navarro, que toma la palabra como sacerdote miembro del sanedrín y negocia con Judas el señalamiento del que Jesús a cambio de 30 monedas.

Fuentes municipales han cifrado en unos 1.200 los asistentes a la representación, que ha durado unas tres horas y ha transcurrido con normalidad. Tras la escenificación, este alcalde convertido temporalmente en Jesucristo ha asegurado, al ser preguntado sobre el realismo de algunas escenas, que se trata de "una obra de teatro" y que mientras sigan pidiéndoselo seguirá haciendo su papel, tras precisar que "la obra existió al margen de la política".

José Luis Torres, que ha sido candidato al Parlamento de Andalucía en las recientes elecciones, ha destacado que se ha registrado mayor asistencia que otros años en la representación, de la que él es director de escena.

Torres conserva su condición de sacerdote, que no pierde aunque ahora no ejerza como ministro de la iglesia por su actividad política, y él fue quien impulsó en el 2000 esta escenificación cuando era párroco de la localidad y ya hacía de Jesucristo.