Angelo Di Gennaro, uno de los presos que participaron el pasado miércoles en la audiencia general con el papa Benedicto XVI, aprovechó la ocasión para fugarse, según comunicaron este lunes fuentes de la cárcel de Castrogno en Teramo (centro de Italia), donde cumplía condena.

Di Gennaro formaba parte de un grupo de

20 presos que representaban a los reclusos de las cárceles de Abruzzo (centro de Italia) en la pasada audiencia general, la que celebra cada miércoles el Papa.

Tras el acto, el preso no se presentó al autobús que les conduciría con el resto del grupo de nuevo a la cárcel. Desde el centro de detención aseguran que Di Gennaro había tenido en el pasado

siete permisos de salida por buena conducta.

Durante la audiencia un representante de los detenidos pudo

saludar el Papa y regalarle una gorra, que el Pontífice se puso durante algunos segundos. En aquella ocasión, el Papa recordó a aquellas personas que sufren y que son encarceladas a causa de las injusticias "presentes en tanta parte de la justicia humana".