Sin embargo, afirmó que ese rechazo no detuvo su intención de averiguar qué estaba pasando, así que participaron en una visita con algunos miembros del consejo local y, después en otra más con todos los grupos políticos, tras las que concluyeron que "parecía que todo se hacía bien".

Martos explicó que, pese a esas visitas, la "rumurología" en el pueblo afirmaba que se tiraban restos humanos a vertederos, por lo que el pasado viernes fue a "contrastar" esos rumores "sobre el terreno". Por tanto, detalló que se dirigió a la escombrera y que, mirando donde los camiones de la obra hacían sus descargas, descubrió esos supuestos "restos humanos".

Tras ese hallazgo, el portavoz de IU manifestó que grabaron y tomaron imágenes para probar sus existencia así como que cogieron algunas muestras que llevaron tanto a la Policía Local como a la Guardia Civil para que abrieran sendas investigaciones, que condujeron a que forenses y agentes judiciales tomaran también muestras.

Martos afirmó que por el momento se desconoce si esos restos tienen 50 ó 200 años, pero indicó que, en cualquier caso, el trato que están recibiendo "no es el más adecuado" por llevarlos a una escombrera y "revolverlos con basura", de ahí que defendiera que si tienen algún valor sean expuestos, pero que si no tiene valor alguno se les dé "un trato digno y adecuado" como pueda ser reunirlos, exhumarlos y llevarlos todos a una fosa común para quemarlos, según sugirió.

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