Un tiroteo que se produjo el jueves en la Universidad de Illinois, próxima a Chicago, deja ya al menos siete muertos y 15 heridos, según informan varios medios norteamericanos.

Tras el tiroteo, el campus fue cerrado y los estudiantes fueron desalojados. "El peligro inmediato ha pasado. El hombre armado ya no es una amenaza", informó la universidad en su página de internet. "Según la Policía el lugar es seguro y sólo debe permanecer en él el personal esencial", agrega.

Las autoridades de la universidad cancelaron todas las actividades lectivas de la noche y ordenaron que sus 25.000 alumnos no concurrieran este viernes a las clases.

Entró en una clase y empezó a disparar

Al parecer, según informa la NBC, el suceso ocurrió a las tres de la tarde en un auditorio de la universidad mientras tenía lugar una clase de geología con cerca de 70 alumnos. Entonces, un joven salió de detrás de una cortina, portando una escopeta y dos pistolas de un calibre 12, y empezó a disparar. Una estudiante del centro, Katie Wagner, indicó que el agresor "era blanco, alto, delgado y vestía una camisa negra".

"Estaba en clase, y todo era normal. Un estudiante de otra clase vino y dijo que había habido un tiroteo y que todo el mundo tenía que irse fuera", dijo otro estudiante llamado Noah a la NBC.

Con los disparos, el agresor mató a cinco personas en el momento, hirió a otras 16 y poco después se quitó la vida. "Los muertos son cuatro mujeres y dos hombres", dijo en un breve comunicado el rector de la Universidad, John Peters. "En total son 22 las víctimas, incluyendo el atacante. Cuatro fallecieron en el lugar y dos cuando eran atendidas", dijo el rector.

Este viernes fuentes sanitarias informaban de que el número de muertos se elevaba a siete después de que uno de los heridos más graves falleciera.