Incluso está dando clases a sus ciudadanos para aprender a ser buenos espectadores. Como puedes ver en el vídeo que hay sobre estas líneas, las lecciones incluyen coreografías comedidas y gritos de aliento para los atletas olímpicos.

No sólo los deportistas chinos están entrenando duro, los futuros espectadores también lo hacen. Y no son clases para unos pocos. Más de 100.000 son las personas que están aprendiendo cómo se comporta un aficionado divertido y correcto.

El objetivo de las autoridades del país asiático es lavar su imagen y usar los Juegos para retratar a China como "un país civilizado", incluyendo ser los mejores en animar.