Desde que el 4 de noviembre de 2003 el Príncipe Felipe dijera en el jardín de la Zarzuela que Letizia "es la mujer con la que quiero compartir mi vida y formar una familia", han pasado un poco más de cuatro años.

Tres días antes, los Reyes habían anunciado, por la vía del comunicado, el compromiso de su único hijo varón con la periodista Letizia Ortiz Rocasolano, que en ese momento presentaba un telediario de TVE.

La noticia corrió como la pólvora por todas las redacciones de los medios de comunicación, porque el heredero se casaba con una plebeya y porque hasta ese momento nada se sabía de esta relación, que había comenzado varios meses antes en Madrid. En este tiempo, los Príncipes han compartido alegrías y disgustos, vida oficial y privada y han formado una familia con sus dos hijas, las infantas Leonor y Sofía.

Desde su casamiento en la catedral de la Almudena de Madrid, el 22 de mayo de 2004, su imagen ha sido la de dos enamorados. Las miradas de complicidad se han sucedido en todas sus apariciones públicas y en los actos oficiales a los que han acudido en representación de la Casa Real.

El primer hijo, una niña

Don Felipe fue padre por primera vez el 31 de octubre de 2005. Letizia dio a luz a su primogénita, una niña que se llama Leonor y cuyo nacimiento abrió el debate, aún sin resolver por el Gobierno, sobre la necesidad de modificar la Constitución para dar entrada a las mujeres en la sucesión a la Corona de España.

Que su segundo vástago fuera otra niña, Sofía, nacida el 29 de abril 2007, ha dejado aparcada la reforma.

Con motivo de su 40 cumpleaños, el próximo miércoles, se han publicado imágenes y un vídeo hasta ahora inusuales sobre la vida familiar de los Príncipes de Asturias. En las instantáneas, distribuidas por la agencia Efe, se ve a Felipe y Letizia paseando por los jardines de la Zarzuela con sus hijas Leonor, a la que su padre enseña a montar en bicicleta, y Sofía en el carrito que lleva su madre. Y dentro del Palacio donde viven, cercano al de los Reyes, enseñando a leer a Leonor.

En estos cuatro años que llevan juntos, han pasado por momentos amargos. Dentro de poco se cumplirá un año de la muerte inesperada de Erika, la menor de las hermanas de la Princesa, que supuso un mazazo para la familia y para Letizia, embarazada en ese momento de su hija Sofía.

Con su madre habla en inglés

La ‘sangre azul’ que corre por las venas del Príncipe de Asturias es del tipo A positivo. Su número de DNI, el 015. Es rubio, con los ojos azules, mide 1,97 metros, calza un 45 de pie y pesa alrededor de 90 kilos. Como su padre, es un apasionado de los coches y las motos, y le gusta jugar al billar y al ping-pong. También es un gran aficionado a la lectura; y en cine, prefiere ver las películas en versión original. Con su madre, la Reina Doña Sofía, siempre habla en inglés; y a su padre, el Rey, tanto él como sus hermanas, las Infantas Elena y Cristina, le suelen llamar patrón.