Una niña de 11 años de Molina de Segura fingió el pasado viernes haber sido secuestrada por tres inmigrantes marroquíes para evitar el castigo que podrían imponerle sus padres por llegar a casa pasadas las cinco de la madrugada, según informaron hoy fuentes municipales.

Los padres denunciaron en el cuartel de la Policía Local y la comisaría de la Policía Nacional en la medianoche del jueves 17 de enero que su hija de 11 años aún no había regresado a casa cuando le habían permitido estar en la calle hasta las 22.00 horas por tratarse del día de San Antón, jornada festiva en la localidad.

La Policía Local puso en marcha un dispositivo de búsqueda sin resultado, hasta que a las 05.30 horas la menor apareció diciendo que tres inmigrantes marroquíes la habían secuestrado y se la habían llevado en una furgoneta de color blanco.

En su declaración a la Policía la niña dijo que había podido escapar de sus presuntos secuestrados por una de las ventanillas del vehículo que estaba abierta.

La menor fue sometida a pruebas médicas y psicológicas no encontrándose indicios de violencia física, tras lo que se determinó que los hechos que narraba no eran ciertos.

Al parecer, la menor urdió la historia del supuesto secuestro para justificar su retraso a la hora de volver a casa y de esta forma evitar el posible castigo que podría caerle.