Una de las primeras cosas que quiso cambiar Juande Ramos cuando llegó al Tottenham fue la dieta de sus jugadores. El técnico manchego observó que estos llevaban un régimen de comidas poco saludables. Además del exceso de peso de algunos de sus jugadores, sobre todo del meta Robinson y del centrocampista Huddlestone, Ramos achacó la pérdida de fuelle al término de los encuentros a la mala alimentación.

Ante este panorama, decidió cambiar sus hábitos alimenticios de la plantilla y, junto al médico Antonio Escribano , el dietista que ya colaboró con él en el Sevilla, Juande programó una nueva dieta. El diario The Sun se hacía eco el pasado 10 de noviembre de la llegada de Escribano, al que bautizó como 'Baby Food' . Informaba de la nueva dieta basada basada en pollo a la brasa y muchas verduras.

"Como un partido de tenis "

El martes The Sun contaba en su edición de papel que la nueva dieta ha tenido efectos secundarios: a muchos jugadores les ha ocasionado serios problemas estomacales hasta el punto de convertir el vestuario del Tottenham en "un concierto de pedos", afirma el tabloide inglés.

Según fuente consultada por The Sun, "la nueva dieta está funcionando muy bien en cuanto a perder peso, pero está teniendo embarazosos efectos secundarios. Es como un partido de tenis en el vestuario. No paran de salir y sonar ventosidades por todas partes".