El rugido de los motores volverá a inundar el fin de semana las calles de Valladolid y, sobre todo, de Simancas. Arranca una nueva edición de Pingüinos . Nueva sede, nuevos accesos, nuevas caras pero la misma pasión de siempre por las dos ruedas.

También se entregarán los Pingüinos de Oro tradicionales a Laia Sanz, Jorge Martínez Aspar y Héctor Faubel.

* Área deportiva Los Pinos. Simancas. Viernes y sábado desde las 12 horas. Domingo: desde las 7.30 horas hasta las 12.30 horas. Inscripción: 20 euros, incluye regalos y vales de comida.

Programación

Viernes. La mañana comenzará con la degustación del tradicional caldo pingüinero a las 12 horas. A las 16.30 horas se desarrollará la excursión a Mojados con freestyle de Emilio Zamora y Narcis Roca. A las 17 horas y en la Acera de Recoletos exhibiciones de A. C. Farias y Los Halcones de México. A las 19 horas concierto de Bluedays y Sherpa y a las 24 horas fiesta de Nochevieja y Año Nuevo pingüinero.

Sábado. El desfile de banderas comenzará a las 12 horas y partirá a Valladolid, donde recorrerá las calles del centro. Tras varios aperitivos y demostraciones, a las 17 horas habrá una nueva exhibición de Freestyle en la Acera de Recoletos. A las 18 horas más música y juegos en Simancas y a las 19 horas arrancará la cena pingüinera. A las 23.30 horas se iniciará el desfile de antorchas en recuerdo a los moteros fallecidos. Después, fuegos artificiales, quema de la falla y música con Danza Invisible.

Domingo. Entrega de los Pingüinos de Oro, sorteo de regalos y clausura de la concentración.

Ya llegó. 1.000 kilómetros en Vespino.

Nacho Llorente, que salió de África el pasado domingo montado en su ciclomotor, disfruta ya de la acampada de Pingüinos. Espera que nadie le supere y llevarse uno de los premios de esta edición.

‘'Desde Marruecos'. Tras seis días de viaje, Nacho Llorente ya está en Valladolid, acampado en las nuevas instalaciones de Pingüinos.

Es uno más de los cerca de 30.000 moteros que pasarán por la concentración, pero es muy probable que ninguno haya recorrido más de 1.000 kilómetros a bordo de una Vespino.

Salió el sábado pasado desde Assilah (Marruecos) y a mediodía del jueves apareció por Simancas. «Hombre, duro sí que ha sido, porque además vengo con una contractura que no puedo ni dar gas», explica.

En el camino ha tenido que cruzar dos veces el estrecho, una para ir desde su Conil natal a Marruecos y la otra de vuelta, chuparse un par de aguaceros importantes y sumergirse entre la niebla. Además, un inevitable pinchazo.

«La gente me pregunta: ¿Por qué vas sólo? Pues porque en Pingüinos tengo 30.000 colegas. A mí me encanta, aunque en el camino he tenido que ir a 35 km/h, e incluso a 10 cuando subía con la lluvia el puerto de Béjar. Que yo he sido mensajero 18 años», recalca. «Ah, que nadie se olvide. Ahora me falta volver».

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