Eso sí, ya no son lo que eran, «han perdido su sentido original de vender lo último para representar el 30% de las ventas anuales del pequeño comercio», aseguran los vendedores. De hecho, según ellos, este año hay un 20% más de ropa en los almacenes que el año pasado, con lo que hay más variedad y más tallas y colores a elegir.

Vender para no guardar

La diferencia entre las grandes superficies y el comercio tradicional se nota sobre todo en los precios, que este año se anuncian con descuentos bastante agresivos.

La capacidad logística no es la misma y al pequeño le urge más vender el género, aunque sea a costa de reducir el margen de beneficio sin  apenas ganarle dinero a la prenda.

Los chollos son los que ciegan al consumidor. «Es falso que por ser rebajas se tengan menos derechos, y hay que exigir», aconseja la Unión de Consumidores.

Un 20% de los comerciantes prefiere retrasar las rebajas

La mayoría está de acuerdo con que haya regulación. Sólo un 5% de los vendedores cree que debería haber libertad total a la hora de hacer descuentos y promociones.

Un 20% de comercios preferiría retrasar las rebajas, para dar tiempo a vender más género de temporada, según una encuesta de Avadeco.

Grandes almacenes y ‘boutiques’ de barrio

José A. Lobato. Comunicación El Corte Inglés.

«El ritmo de compra es ágil»

«Se duplica la afluencia de un día normal y el ritmo de compra es muy ágil. De hecho, hay artículos que se acaban el primer día. Si por ganga entendemos hasta descuentos del 70%, claro que las hay. Sobre todo al final, en las segundas rebajas. Y no hablamos sólo de textil, sino también de hogar, muebles y electrónica».

Sandra Gómez. Moda Doblecero, La Rondilla.

«Incluso pierdo dinero»

«Los primeros días no viene mucha gente, pero más adelante sí. El cliente compra, pero el margen que llevamos es tan pequeño y el precio que ponemos es ya de por sí tan bajo que tampoco podemos hacer grandes rebajas. Es más, hay veces que prefiero perder dinero antes que quedarme con la prenda sin vender».

¿Hay picaresca en rebajas?

Para eso hay inspección

«El cliente actual sabe lo que quiere»

«El consumidor es maduro y sabe lo que quiere. No obstante, para eso hay inspección. Tampoco tienen la misma capacidad el grande y el pequeño. Hablamos de marcas propias y de almacén donde guardar el género sin vender».

Luis del hoyo

Secretario General de Avadeco

Haberla haila

«Los hay mejores, peores y regulares»

«Tenemos un comercio serio y profesional en general. Pero hay de todo, y la prueba está en las quejas de todos los años en temas como las devoluciones. Hay que distinguir entre el trato personal de unos y el marketing y la parafernalia de otros».

Prudencio Prieto

Presidente de la Unión de Consumidores