El Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco aprobará el próximo mes de julio la ampliación de las zonas de protección de siete monumentos extramuros de Ávila que el pasado verano fueron incorporados al conjunto inicialmente declarado Patrimonio de la Humanidad en 1985.

Así lo ha confirmado el alcalde de Ávila, Miguel Ángel García Nieto, quien ha informado de que el Ayuntamiento ha remitido ya a la Unesco el informe técnico solicitado sobre la naturaleza de las zonas que rodean esos siete bienes y que también estarán protegidas para evitar cualquier posible alteración.

Esos siete monumentos situados fuera del recinto amurallado de Ávila son los conventos de Nuestra Señora de Gracia, de La Encarnación y de San José, el Real Monasterio de Santo Tomás, y las iglesias de Nuestra Señora de la Cabeza, de San Martín y de San Nicolás.

García Nieto ha recordado que fue el propio Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco el que, con motivo de la revisión quinquenal del título de Ciudad Patrimonio de la Humanidad concedido a Ávila en 1985, recomendó al Ayuntamiento una mayor protección del perímetro de los siete monumentos extramuros, también conocidos como "zonas tampón".

El pasado verano, durante una reunión de la Unesco celebrada en Nueva Zelanda, se tomó la determinación de extender el título de Ciudad Patrimonio de la Humanidad a esas "zonas tampón", al tiempo que instó al Ayuntamiento de Ávila a definir la zona afectada por la citada declaración.

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