Por provincias, Zaragoza es la que contabiliza un mayor número de donaciones (32.603), seguida por Teruel (6.417) y Huesca (3.742). Al respecto, es destacable el índice de donación (donaciones por mil habitantes) en la provincia de Teruel, que, con un 47,37, se sitúa en el primer puesto del ránking de índices de donación del resto de comunidades autónomas.

La diferencia positiva con respecto a 2016 se encuentra en las donaciones por aféresis, las cuales se han triplicado respecto del año a lo largo del 2017. En este tipo de donación, que permite un mayor rendimiento, se extraen solo aquellos componentes sanguíneos necesarios (plaquetas, plasma, hematíes) y, el resto, sobre todo los glóbulos rojos, se devuelve al paciente por la misma vía, lo que posibilita que el donante pueda donar con mayor frecuencia y por lo tanto, se contribuye a su fidelización.

En cuanto al número de nuevos donantes, el año pasado se ha contabilizado 5.017 (561 más que en 2016). Destacar el aumento en un 3 por ciento de los donantes jóvenes de 18 a 28 años, lo que permite empezar a hablar en términos positivos de un cierto relevo generacional.

En este sentido, el Banco de Sangre y Tejidos de Aragón ha iniciado a lo largo de 2017 diferentes acciones con el fin de difundir la cultura de la hemodonación entre los jóvenes, como el proyecto EducoDono, dirigido a alumnos de ESO; los talleres infantiles Al Banco en familia, que se han celebrado durante la Navidad; y la creación de un espacio de recursos educativos en la página web de la entidad.

Respecto a los puntos de donación, las donaciones en unidades móviles representan el mayor porcentaje (70,8 por ciento), aunque en 2017 se ha incrementado en un 2 por ciento el volumen de donación en las instalaciones del Banco de Sangre y Tejidos de Aragón y un 0,5 por

ciento en los puntos fijos de los hospitales, fundamentalmente en el Hospital San Jorge de Huesca.