Veinticuatro cazas F-16 turcos han bombardeado posiciones de los combatientes del proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el norte de Irak, incluida la zona de las montañas Kandil donde tienen su base principal, informó el Estado Mayor del Ejército turco.

Tras una incursión aérea de cuatro horas, las Fuerzas Armadas turcas continuaron esta madrugada su ofensiva con bombardeo de artillería de largo alcance.

Se trata de la mayor operación militar transfronteriza del ejército turco en el país vecino, después de haber obtenido la autorización pertinente del Gobierno de Ankara el pasado noviembre.

La agencia de noticias Dicle, cercana a los nacionalistas kurdos, aseguró que al menos una persona no vinculada al grupo terrorista murió y dos resultaron heridas, en bombardeos de varios pueblos en el norte iraquí.

El Estado Mayor instó a los periodistas a no entrar en la región donde se producen las operaciones por razones de seguridad.

Contra el PKK

También subrayó que la operación militar tiene como objetivo exclusivamente al PKK y que continuará en el marco de la autorización dada por el ejército y por el gobierno.

Tras la muerte de 13 soldados y la captura de otros ocho en un combate contra unos 300 militantes del PKK en Daglica el pasado 21 de octubr e, la opinión pública turca y los partidos de oposición presionaron al Gobierno para que diera luz verde a una incursión militar en el norte de Irak, donde se refugian los combatientes del PKK.

La primera operación militar tuvo lugar el uno de diciembre también en forma de bombardeo aéreo y de artillería pesada, si bien a una escala mucho menor que la de este domingo.

Manifestación en Alemania

Unos 10.000 kurdos según cálculos de la policía se manifestaron hoy en la ciudad de Düsseldorf (oeste de Alemania) contra las acciones militares de Turquía en el Kurdistán iraquí.

La manifestación transcurrió sin incidentes aunque fue considerada de riesgo por la policía, que destinó a la misma un millar de agentes.

La manifestación había sido convocada por la Federación de Asociaciones kurdas de Alemania, que esperaba reunir en Düsseldorf a unos 22.000 kurdos de varios países europeos.