El progresivo deterioro que han sufrido los edificios ubicados en la zona de la Ajerquía Norte no sólo ha afectado a los vecinos de este histórico enclave de la ciudad, sino que los comercios también se han visto perjudicados. La Junta reconoce que en los últimos años se han producido numerosos cierres de establecimientos en este barrio. Por este motivo, la Consejería de Obras Públicas y Transportes ha decidido crear una nueva línea de ayudas del programa de Rehabilitación Concertada de la Ajerquía Norte para mejorar el estado de las tiendas y evitar así su desaparición.

Los comercios podrán solicitar hasta un 65% de la inversión que necesitan para remodelar sus locales, hasta llegar a un máximo de 50.000 euros, según señala el delegado provincial de Obras Públicas, Francisco García. Eso sí, los establecimientos deberán estar situados en inmuebles con más de 10 años de antigüedad, localizados en edificios de VPO o con viviendas que estén siendo rehabilitadas.

No se quedan ahí los planes de la Junta, puesto que también pretende que abran sus puertas en la zona nuevos comercios, «sobre todo, en materia turística», según afirma el director del Área de Rehabilitación Concertada de la Ajerquía Norte, José Requena.

Un millar de peticiones

Desde que a finales de 2005 se puso en marcha la oficina para pedir ayudas, se han presentado 1.155 solicitudes, según datos de la Junta. Aún se pueden reclamar las subvenciones hasta el 20 de diciembre en la citadas dependencias situadas en la c/ Arroyo de San Lorenzo, 23.

Otra imagen para Fray Albino

Tres son las áreas de rehabilitación concertada aprobadas en la provincia por la Consejería de Obras Públicas y Transportes, como son la de Ajerquía Norte, San Martín de Porres –ambas en la capital– y la del centro histórico de Montoro. El pleno del Ayuntamiento acordó ayer solicitar a la Junta la inclusión en 2008 del barrio de Fray Albino, en el Sector Sur, dentro de este programa de ayudas que permite dar subvenciones para remodelar los edificios y viviendas de zonas deprimidas. El Consistorio justifica esta solicitud al Gobierno andaluz en que muchos de los 2.900 inmuebles ubicados en este enclave de la ciudad sufren un «importante deterioro», debido a que su  construcción data de la década de los cincuenta.