El cabeza de lista de la CUP, Carles Riera, afirmó este martes que su formación será la "garantía" de que tras las elecciones del 21-D "la mayoría republicana no caiga en la tentación del autonomismo y la claudicación" y se "materialice" la "república" catalana por la vía unilateral.

Así lo afirmó Riera en el mitin final de la CUP en Barcelona ante unas mil personas en el pabellón de Virrei Amat, en paralelo a otros actos que los anticapitalistas organizaban en Reus (Tarragona), Figueres (Girona), Balaguer (Lleida) y Alcanar (Tarragona).

"El día 22 seremos garantía de que la mayoría republicana no caiga en la tentación del autonomismo y la claudicación, de que las disputas de quién mandará no nos distraigan de cuál es el objetivo: la república", aseveró.

Riera señaló que, "igual que una media verdad es una media mentira, media desobediencia es sumisión", e indicó a ERC y a Junts per Catalunya que "será necesario desobedecer para hacer una república que de ninguna de las maneras se podrá construir desde la bilateralidad y el diálogo con el Estado".

El cabeza de lista de la CUP, formación que puede ser fundamental para posibilitar un gobierno independentista si sus escaños suman mayoría absoluta con Junts per Catalunya y ERC, pidió a los electores que "confíen" en su candidatura porque se comprometen "a ser la voz de millones de personas que el 1 de octubre pusieron sus cuerpos para la república".

Riera cargó contra las "lágrimas de cocodrilo" que según él derramó el candidato socialista, Miquel Iceta, cuando afirmó que pediría el indulto para los líderes independentistas en caso que fuera elegido president y éstos fueran condenados.

Sobre las palabras del socialista Josep Borrell, que dijo que era necesario "desinfectar" algunas partes de la sociedad catalana, indicó que "por cada desinfectado haremos crecer millones de bacterias antifascistas y virus rebeldes".

Riera también criticó, como ha hecho a lo largo de la campaña, a los comunes, de quienes dijo que su "equidistancia" equipara "la rabia del verdugo con la entereza de la víctima". "¿Cómo es que dan la espalda a todos aquellos que recibieron golpes de porra de la policía?", indicó.

"Hemos hecho la revolución de las sonrisas pero nos han puesto el dedo en la boca para ahogarnos. Si nos lo vuelven a poner deberemos demostrar que también tenemos dientes", indicó Riera en alusión a las cargas policiales del 1 de octubre y la intervención de la autonomía catalana.

Cargó asimismo contra Ciudadanos, de quien dijo que se ha podido ver "a cara descubierta" su "lerrouxismo y neofranquismo".

El sindicalista, alcalde de Marinaleda (Sevilla) y exdiputado en el Parlamento de Andalucía José Manuel Sánchez Gordillo, también presente en el acto, afirmó que el pueblo catalán es "quizás uno de los pueblos más dignos del planeta Tierra".