Oliva ha hecho estas declaraciones después de reunirse con representantes de estos vendedores ambulantes, que "llevan ya más de dos meses sin poder realizar su trabajo desde que el Ayuntamiento hispalense decidió prohibir, a finales de septiembre, la instalación de este mercadillo alegando para ello motivos de legalidad y sin aportar ninguna alternativa a las personas afectadas por esta medida".

La concejala de IU ha mostrado su disconformidad con las formas empleadas por el gobierno del PSOE para "acabar de un plumazo con un mercadillo que hasta ahora daba de comer a más de 500 familias". En su opinión, a la delegada municipal de Economía y Comercio, Carmen Castreño, "le ha sobrado soberbia en este asunto y le ha faltado sensibilidad y voluntad de diálogo con un colectivo que, en su mayoría está formado por personas que han sufrido con virulencia los graves efectos de la crisis y que dependen de estos ingresos para subsistir".

"Si hay gente que comete ilegalidades en el Charco de la Pava, habría que actuar contra estos infractores, pero no desalojar todos los puestos haciendo pagar así a justos por pegadores", ha expuesto Oliva. Igualmente, la edil de IU ha dejado claro el apoyo de su formación política a la manifestación que los vendedores ambulantes afectados por este cierre han convocado el viernes para reclamar la reapertura del mercadillo.

Desde la federación de izquierdas, se considera que este "problema" muestra la "incapacidad" del gobierno de Espadas para normalizar el mercadillo de los domingos del Charco de la Pava y, al mismo tiempo, "evidencia la necesidad de agilizar al máximo, desde el Ayuntamiento, la regularización de este sector y, especialmente, la venta de productos usados, ya que en la actualidad esta actividad no se recoge en la ordenanza municipal".