El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha expresado este miércoles su rotunda condena por el asesinato de un hombre por lucir unos tirantes con la bandera de España y ha confiado en que la justicia haga su trabajo tras el asesinato de Victor Laínez.

Laínez fue agredido el pasado 8 de diciembre en un bar de Zaragoza por Rodrigo Lanza, un joven que ya había sido condenado por lesionar gravemente a un policía local y falleció este miércoles en Zaragoza a los 53 años debido a las lesiones sufridas.

Preguntado si no se arrepiente de haberse reunido hace un par de años con los familiares del presunto agresor, que fue protagonista de un documental sobre el movimiento okupa, Iglesias ha señalado que su partido siempre se ha reunido con "colectivos sociales".

Lo cierto es que en aquella ocasión, tanto Pablo Iglesias como la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, arroparon al presunto autor de aquella agresión, que ocurrió en 2006, y aseguraron que la detención de Lanza y su acusación eran "injustas". Es más, el abogado que le defendió entonces fue Jaume Asens, mano derecha de Ada Colau en el Ayuntamiento de Barcelona.

El agente quedó en estado vegetativo por el ataque sufrido cuando acudía en horas de servicio a desalojar una casa okupada. En esta ocasión, tras su detención por la muerte de Laínez, Rodrigo Lanza, de 33 años, está acusado de un delito de homicidio.

La coordinadora de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, también ha condenado este miércoles la agresión asegurando que es "absolutamente terrible" porque convierte "lo que debería ser una discusión democrática" en un "enfrentamiento violento".

Rodríguez ha condenado este suceso y ha hecho un llamamiento a la "necesidad de responsabilidad" de las personas que ostentan cargos públicos para que proyecten en sus discursos "diálogo y negociación política empática".

"A las personas que tenemos responsabilidades públicas y emitimos discursos públicos, tratemos de proyectar la negociación política empática, la legitimación de las diferencias, las posiciones templadas cuando tienen que ver con un proyecto común como queremos que sea este país", ha dicho, en una entrevista en Cuatro, recogida por Europa Press.

Por su parte, el Ayuntamiento de Zaragoza (gobernado por Pedro Santisteve, de Zaragoza en Común) ha aprobado este miércoles una declaración institucional en la que todos los grupos municipales condenan de forma unánime el homicidio de Víctor Lainez a consecuencia de una agresión y transmiten su cariño a familiares y amigos.

El Ayuntamiento de Zaragoza recuerda que la forma pacífica de la ciudadanía, basada en la coexistencia de esas divergencias y las maneras de mirar al mundo "han servido para hacer de Zaragoza una ciudad más abierta y tolerante, más fuerte, más libre y más democrática".

En este sentido, el consistorio zaragozano repudia cualquier manera de proceder que se sustente en la violencia radical y en el odio y aboga por que la ciudad sea el espacio de todos los ciudadanos, "sin que nadie se arrogue ni siquiera la posibilidad de hacerla suya en contra de los derechos de los demás".

Indignados por el suceso, los grupos aseguran que desde el Ayuntamiento no se va a "permitir que en virtud de ideas o modas, ningún espacio de la ciudad se convierta en un terreno hostil" o que "la violencia encuentre terreno para campar por sus anchas".

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha recalcado este miércoles, respecto al caso, que hay que tener "una tolerancia cero con todos aquellos que ejercen violencia, venga esa violencia del radicalismo que sea". "Me da exactamente igual que sea de un signo o de otro", ha añadido.

Zoido ha señalado en Valencia, donde ha explicado una operación contra el narcotráfico, que el detenido era una persona "muy radical" y que "ese radicalismo lo ejerció" contra la víctima.

Zoido ha señalado que, como "la mayoría de españoles", quiere "vivir en un país en el que nadie pueda ser agredido o insultado por llevar una bandera o pensar de una u otra forma".

Además del ministro, Ciudadanos y el Gobierno han condenado este miércoles la agresión. El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha señalado que en un país democrático como España no se pueden tolerar "delitos de odio" "y mucho menos que se asesine a personas por llevar los símbolos oficiales de un país, como la bandera de España".