Así, el mandatario autonómico ha concretado, en una entrevista en RNE recogida por Europa Press, los días que participará en la campaña electoral del 21-D después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, convocase elecciones en esa comunidad tras la declaración unilateral de independencia que se votó en el Parlament.

"Iré con mis compañeros del PP de Cataluña para participar como presidente autonómico de una nacionalidad histórica, para decir que se puede perfectamente catalán y siendo catalán es ser una forma de ser español en Cataluña", ha manifestado en su intervención, en la que ha añadido que él considera que "ser gallego es la forma de ser español".

Sobre sus análisis de cómo está la situación actual en Cataluña, Feijóo ha indicado que los resultados "dependerán de la participación" y se ha mostrado convencido de que "una gran movilización" puede "abrir una nueva era política en Cataluña", de manera que "deje" de seguir la tendencia de la última década para retomar su "solvencia" y "potencia" como comunidad.

"En los últimos años ha sido ejemplo de lo que no debía ser", ha manifestado Feijóo, quien ha añadido que ahora Cataluña "es más pobre" que hace unos años y "no tiene ninguna relevancia" desde el punto de vista de las "buenas prácticas y la buena gestión". Al respecto, ha incidido en que "debe 70.000 millones y una hacienda con muchas dificultades".

PUIGDEMONT: "ELEMENTO NOCIVO"

"La política puede hacer mucho daño y si, además, es una política que fractura, divide a la sociedad y familias u organización social, esa política hay que jubilarla", ha insistido Feijóo, quien ha juzgado que Carles Puigdemont "ha perdido el sentido de la realidad" y "no puede interpretar el futuro de forma correcta".

"Lamentablemente hay personas que desconectan de la realidad y suplantan la realidad con una ficticia. No sé si quiere llevar a su pueblo por las estepas errantes del mundo", ha cuestionado el presidente autonómico, quien ha evaluado el "daño" que ha hecho, dijo, Puigdemont a su país y, por lo tanto, "sería bueno que se dedicase a otra cosa", ya que es "un elemento nocivo".

"No sólo destrozó a su partido, sino la unidad de la sociedad catalana. Eso en política no es admisible", ha sentenciado el presidente de la Xunta.