Según se ha informado desde la Junta de Andalucía, en el momento de la inspección, en el paraje Pilar de la Dehesa, próximo al polígono de Fuerte del Rey, los agentes del área de Medio Ambiente comprobaron que tenía colocadas 13 costillas con hormigas de ala como cebo. En ese momento, sólo había logrado atrapar dos pajarillos, identificados en un principio como una especie protegida conocida como pardillo común (Carduelis Cannabina).

Este tipo de capturas de aves fringílidas, sin autorización y empleando métodos ilegales, está prohibida según resolución de 11 de agosto de 2014 de la Dirección General de Gestión del Medio Natural de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio sobre capturas excepcionales de aves. Dependiendo del tipo de aves capturadas (si son especies sujetas a una especial protección), incluso se podría incurrir en un delito relativo a la protección de la flora y la fauna silvestre.

Los policías constataron que dentro del vehículo propiedad del denunciado tenía un total de 133 trampas (costillas) y cinco redes japonesas abatibles. Al comprobar que carecía de autorización para poder realizar este tipo de capturas, se procedió a intervenirlas y a levantar la correspondiente acta de denuncia que se remitió a la Delegación Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio para la instrucción y resolución del oportuno expediente sancionador.