En una rueda de prensa en Santiago, en la que fue preguntado al respecto, ha reflexionado que situaciones de este tipo reflejan que, en el breve tiempo transcurrido desde que Gonzalo Caballero tomó las riendas del PSdeG, se ha demostrado "que el partido sigue siendo el viejo partido" de "las luchas de sangre entre 'Caballeros'" o de los enfrentamientos "entre familias políticas en Ourense o A Coruña".

"Tengo la sensación de que estamos ante el PSOE de siempre, el viejo, el que no da la cara ni colabora con las instituciones", ha reflexionado, antes de señalar que "hay comportamientos cuestionables" como "montar dos gestoras en dos provincias donde no tiene el control del partido".

"Monta gestoras para que le dirijan congresos que sus afines parece que no pueden ganar", ha esgrimido, antes de desear "suerte" al PSdeG. "Y lo digo en serio, porque cada vez que al PSOE le va mal, es una buena oportunidad para los populistas, para las mareas de Podemos", ha sentenciado.

Finalmente, el popular ha manifestado su deseo de que los socialistas se "regeneren, rearmen y se presenten como alternativa". "Pero es un partido a la deriva en el que ni los suyos respetan el liderazgo de Caballero", ha concluido.