Para atajar este problema, el representante de la Administración autonómica ha reseñado que es "importante" que los profesionales de los hospitales o de los centros sanitarios cuenten con apoyo y, para ello, es "muy necesaria" la nueva puesta en marcha por el Gobierno y la Junta del interlocutor policial territorial sanitario.

Esta figura ya ha empezado a funcionar en Salamanca, según ha reseñado el subdelegado del Gobierno en Salamanca, Antonio Andrés Laso. Concretamente, un inspector del Cuerpo Nacional de Policía ya atiende los casos de las ciudades de Salamanca y Béjar, y un teniente de la Guardia Civil se ocupa de los casos de los otros 360 municipios de la provincia.

El subdelegado ha explicado que el interlocutor trata de ofrecer "un seguimiento individualizado de cada incidente", una actividad a la que se sumarán otras propuestas como acciones formativas sobre prevención y autoprotección, y mayor seguimiento también a hechos delictivos de este tipo que también están aumentando a través de las nuevas tecnologías.

Sobre las agresiones registradas en 2016, último año con datos completos, el delegado territorial ha indicado que Salamanca sumó 46 agresiones con 61 trabajadores implicados. Y, de esas acciones con víctimas sanitarias, 22 tuvieron lugar en el Hospital y 24 en centros de salud.

Tanto Bienvenido Mena como Antonio Andrés Laso, han indicado que las amenazas, vejaciones, injurias y agresiones se producen, principalmente, durante horario nocturno, en servicios de urgencias y a mujeres sanitarias.