Martínez, que ha realizado estas declaraciones tras el Consejo de Administración, al ser preguntado por cómo la situación en Cataluña puede afectar a los puertos de Barcelona y València, ha advertido de que "si las cosas fueran negativas, sería negativo para los dos puertos porque si su tejido productivo pierde clientes y por tanto retrasa sus inversiones, eso se va a traducir en menores tráficos e importaciones y los dos vamos a tener problemas".

A su juicio, "una solución negativa del conflicto de Cataluña no viene bien absolutamente a nadie" y ha alertado de que "una solución dramática, a ambos colectivos los lleva al precipicio directamente". Aunque espera que "eso no se va a producir".

Además, ha señalado que "hay que tener en cuenta que el primer cliente que tienen las empresas valencianas es Cataluña" y que "el 40% del comercio que tienen las empresas catalanas es con la economía española".

Martínez se ha mostrado preocupado por la "sensación de crispación que se está viviendo" y desea "que se pase esta fase".