Esta reducción de cinco filiales de empresas extranjeras se ha traducido en un retroceso del volumen de negocio de casi el 4% (3,9%), al pasar de 4,3 millones de euros en 2014 a 4,2 el año siguiente.

Sin embargo, ha sido mayor, de un 24,8%, la caída del valor de la producción, que en 2015 llegó a los 2,19 millones de euros frente a los 2,92 millones del ejercicio anterior.

Con todo, el resultado de la explotación ha arrojado un saldo positivo de 509,8 millones en 2015 frente a los números rojos (-658,8 millones) del año anterior. En este sentido, el total de ingresos de explotación ascendió a 4.378 millones en 2015 (un 3,4% menos) y el de gastos de explotación a 3.863 millones (un 25,4% menos).

Las filiales de empresas extranjeras en Cantabria ocuparon en 2015 a 5.493 personas, 1.110 menos que un año antes (-16,8%). Paralelamente, los gastos de personal de estas filiales se redujeron un 14,5% al pasar de 336 millones a 287,2.