El AcuariUM es centro pionero entre acuarios públicos europeos en la reproducción en cautividad de esta especie. Durante estos cinco años se ha llevado a cabo un seguimiento exhaustivo y sistemático del proceso reproductor y se ha obtenido una gran cantidad de información sobre la biología y el comportamiento de la especie, resultados que serán publicados próximamente en revistas especializadas.

Con la llegada del rector José Orihuela en mayo de 2014, el acuario de la Universidad de Murcia pasó a depender del Vicerrectorado de Investigación, con el fin de potenciar la faceta investigadora de esta estructura universitaria.

Además de sus objetivos educativo y divulgador, el investigador es un objetivo prioritario que persigue planificar y realizar trabajos de investigación sobre determinados aspectos de los organismos marinos.

Con ese objetivo desarrolla diversas líneas de trabajo, entre las que destaca la de facilitar la creación y consolidación de otros grupos reproductores de tiburones de puntas blancas de arrecife en distintos acuarios públicos.

Para ello se han activado convenios de colaboración con diferentes centros. La creación y el establecimiento de estos grupos de cría en otros acuarios públicos contará con la información y experiencia obtenidas por el equipo de investigación del Acuario de la Universidad. En esta línea, el AcuariUM ya ha proporcionado ejemplares nacidos en este centro, al Acuario de Madrid y al Oceanografic de Valencia.

Los tiburones de puntas blancas de arrecife están catalogados como especie amenazada, en el Libro Rojo de especies en peligro, por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).

Se trata de una especie que vive en estrecha relación con los arrecifes de coral, donde desarrolla su ciclo de vida. Tiempo atrás era una especie muy común, aunque en los últimos años, debido a la sobrepesca, las poblaciones de esta especie, al igual que otras muchas especies de tiburones están en regresión.

La principal causa del deterioro de las poblaciones de tiburones en todo el planeta es la pesca desproporcionada, dirigida a la obtención de aletas destinadas al consumo de "sopa de aleta de tiburón" en restaurantes asiáticos.

Se están reduciendo drásticamente las poblaciones de especies que se encuentran en la cima de la pirámide trófica del mar, lo que puede tener consecuencias catastróficas. Es necesario llegar a un acuerdo internacional para regular la pesca de tiburones y dotar a las especies más afectadas de un estatus apropiado de protección.

Desde instituciones como el Acuario de la Universidad de Murcia se trabaja para poder conservar estas especies en sus hábitats naturales, por medio de la obtención de conocimientos sobre su biología, comportamiento y sus relaciones ecosistémicas.