Así lo han confirmado el presidente de la Asociación de Restauración de Mallorca, Alfonso Robledo, y el presidente de la Asociación de Salas de Fiesta y Discotecas de Baleares, Jesús Sánchez, tras abandonar la reunión que se ha celebrado en la Conselleria de Trabajo para negociar el convenio, que afectará a más de 137.000 trabajadores de las Islas.

"Reprochamos no haber sido actores en la negociación", ha lamentado Sánchez. "Pedimos poder ocupar nuestro espacio y que se contemple la singularidad de estos sectores que, aunque sean pequeños, tienen su importancia", ha añadido el presidente de la patronal de salas de fiesta.

El presidente de la Asociación de Restauración de Mallorca ha advertido que este incremento salarial puede suponer, incluso, "el cierre de empresas de restauración", porque no podrán asumir el incremento salarial planteado.

Asimismo, Robledo ha dicho que "les ha molestado que no se les haya informado de las negociaciones y que no se nos haya dado nuestro espacio lógico para trasladar nuestro criterios".

En este contexto, el responsable de la patronal de salas de fiesta ha explicado que "siguen intentando" la posibilidad de salirse de este convenio y acogerse al nacional "si jurídicamente lo podemos hacer".