Las mayores inversiones se van a realizar en la ikastola Amaiur y en el colegio público San Francisco, con 117.668,35 euros y 114.812,56 euros, respectivamente. En Amaiur se reformarán los baños y ya se ha procedido a la sustitución de persianas en el centro. En San Francisco se reformarán los aseos de la planta baja y primera planta y se realizarán diferentes actuaciones en las protecciones contra incendios.

En el C.P. Iturrama está previsto invertir 83.149,28 euros en la reforma de las ventanas del centro para instalarlas de aluminio. En el Vázquez de Mella los trabajos consisten en la creación de un baño para el alumnado y un baño para el profesorado. El presupuesto es de 73.526 euros. Más de 20.000 euros se invertirán en tres centros. En Hegoalde se creará una rampa de acceso al gimnasio, que conlleva un gasto de 26.942,59 euros. Además, Conservación Urbana ha arreglado las filtraciones de las bajantes del gimnasio.

En San Jorge se invertirán 22.612,31 euros para sustituir el fibrocemento en el techo de la cocina del centro. En Elorri se llevarán dos actuaciones con un presupuesto de 20.150 euros. Por un lado, se mejorarán las canalizaciones del patio cubierto pequeño para evitar las filtraciones y, por otro, se adecentará la grada exterior de la entrada al gimnasio.

En el C.P. Ermitagaña se van a reformar las ventanas de la última fachada, en el alzado sur del edificio, por un importe de 18.052 euros. Los dos últimos centros en los que se acometerán obras serán Bernat Etxepare y Patxi Larraintzar. En el primero de ellos se invertirán 8.590,58 euros para arreglar las lamas del falso techo de la zona cubierta exterior. Con la baja en la licitación, si se produjera, se podría eliminar, como se ha pedido desde el centro, la reja metálica vertical. En Patxi Larraintzar, con 6.000 euros se trabajará en el sistema antiincendios y se repasará la instalación actual.

3.000 EUROS PARA CADA CENTRO PÚBLICO

Además de este plan de inversiones establecido para lo que queda de año, el Ayuntamiento de Pamplona va a conceder a cada colegio o ikastola pública de la ciudad una partida de 3.000 euros para que lleven a cabo las obras o las mejoras en sus instalaciones que consideren oportunas.

Se trata de esta forma de poner a la libre disposición de los centros una cantidad económica para que puedan acometer lo que se denomina 'trabajos menores' que redunden en una mejor adecuación de los espacios tanto para el alumnado como para el profesorado. De esta manera, se pueden realizar pequeñas obras o acondicionamientos sin tener que esperar al diseño de un proyecto o a la confección de un expediente administrativo que puede demorar esos trabajos.