Entre 5 y 10 años. Los niños españoles ya casi no juegan con sus padres. Sólo dos de cada diez lo hacen a diario, y al llegar el fin de semana la media apenas asciende a tres. Ésta es la principal conclusión de la Encuesta Duracell de Juguetes 2007, un estudio europeo realizado a 900 niños de entre 5 y 10 años y a sus padres para descubrir cuáles serán los juguetes más deseados en las próximas Navidades.

Así, la encuesta revela que la mayoría de los pequeños (32%) prefiere sus juguetes para pasar su tiempo libre. El segundo lugar lo ocupa la tecnología (17%), hasta el punto de que los niños españoles son los europeos a los que más les gustan los videojuegos y las consolas, y los que menos valoran jugar al aire libre (11%).

En este sentido, el estudio indica que los juguetes electrónicos y digitales están empezando a ganar posiciones respecto a los clásicos, como la Barbie o el scalectrix, que aunque se mantienen dentro de los diez preferidos, van perdiendo puestos. No en vano la cámara digital de Fisher Price encabeza el top ten.

Otras de las conclusiones  es que los padres españoles, sólo superados por los ingleses, son los que más gastan en juguetes para Navidad en Europa. En total, 232 euros, 86 más que la media.