El presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, ha tenido un desliz este jueves al afirmar que si algún día se votara en favor de la independencia de Cataluña, la Unión Europea (UE) respetará esa decisión, pero recalcó que el hipotético nuevo país quedaría fuera del club comunitario.

Tras ello, un portavoz del presidente han matizado que la posición de Bruselas es la que dicten las Cortes generales y el Tribunal Constitucional, y el eventual resultado solo sería aceptado en la UE si lo es en España.

"La decisión del Tribunal Constitucional debe ser respetada, y por lo tanto el resultado de un referéndum solo puede ser aceptado si se cumple esa condición", dijo el portavoz, que agregó que Juncker reitera la posición de la Comisión, "tal como se ha expresado en varias respuestas al Parlamento Europeo desde la Comisión Prodi".

Las declaraciones del político luxemburgués se han producido durante una entrevista en la cadena Euronews en la que también respondió a las preguntas de tres youtubers europeos.

"Es evidente que si un 'sí' a la independencia de Cataluña llegara un día, respetaremos esa decisión, pero Cataluña no podrá convertirse en miembro de la Unión Europea al día siguiente", aseguró Juncker durante la entrevista.

En ese sentido, precisó que la región española de Cataluña debería seguir un proceso de adhesión del mismo modo que ha ocurrido con otros países de la UE.

Pese a sus declaraciones, Juncker resaltó que la Comisión tiene por principio no participar en los debates internos de un país, aunque sean "democráticos, aceptables y aceptados".

"La Comisión Prodi, la Comisión Barroso y la mía siempre hemos dicho que en la materia, seguiríamos y respetaríamos las decisiones del Tribunal Constitucional español y del Parlamento español", subrayó.

Aunque destacó el valor de las tradiciones regionales, el presidente del Ejecutivo de la UE manifestó su deseo de que no se conviertan en un elemento de "separación y fragmentación" en el Viejo Continente.