La muestra, que se podrá visitar hasta el 28 enero de 2018, reúne cerca de un centenar de obras en formato fotográfico, vídeo, pintura o instalación, que se agrupan alrededor de cuatro ejes conceptuales: Espacios privados, ámbitos personales; El cuerpo, el deseo, la sexualidad; Lugares y símbolos de lo público, y finalmente, La historia, sus pliegues y conflictos.

Entre las artistas participantes hay obras de Nadia Benchallal, Mona Hatoum, Ghada Amer, Nermine Hammam, Zohra Bensemra, Diana El Jeiroudi, Farida Hamak, Amal Kenawy, Tamara Abdul Hadi, Zineb Sedira, Raeda Saadeh, Ahlam Shibli, Mohammed Soueid, Akram Zaatari, Leila Alaoui, Rana El Nemr, Rula Halawani, Randa Maddah y Nidaa Badwan. Imágenes de archivo de la Arab Image Foundation y de la American University in Cairo. También se incluyen algunas obras que reflexionan sobre la construcción de la feminidad realizadas por hombres.

Con esta muestra, el IVAM quiere dar voz a las mujeres árabes, "las más olvidadas", y a su cultura, "muchas veces menospreciada y una profunda desconocida" para los países occidentales "llenos de prejuicios", ha apuntado el director del IVAM, José Miguel G. Cortés, durante un recorrido por la exposición, acompañado por el comisario, Juan Vicente Aliaga.

El responsable del museo ha destacado que en este caso las mujeres árabes no son "el objeto" de la exhibición sino "el sujeto". "Ellas mismas ofrecen sus puntos de vista sobre su manera de ver la sexualidad, las relaciones, el espacio público, su historia... fuera de la visión paternalista o colonialista de los países occidentales".

Para Cortés es fundamental que este sea un lugar de "debate en el que cada uno saque sus propias conclusiones. "El IVAM no puede ser un torre de marfil al margen de los conflictos culturales y sociales. Queremos ser agentes activos claramente posicionados con la libertad de expresión artística", ha manifestado.

Así, las 24 protagonistas de la muestra son mujeres de entre 40 y 50 años, algunas formadas fuera de sus propios países. "Son emprendedoras, intentan cambiar el mundo a través de micropolíticas, se rebelan ante imposiciones culturales y políticas" y "van más allá de lecturas occidentalistas llenas de clichés y estereotipos", ha subrayado el comisario Aliaga.

REALIDADES HETEROGÉNEAS

El título de la muestra 'En Rebeldía' alude al deseo de romper con los discursos dominantes de género presentes en todo el mundo. Sus narraciones femeninas pretenden erosionar el dualismo que separa Oriente de Occidente, basado en el binomio Modernidad versus Tradición, y atravesar fronteras mentales y culturales.

El recorrido expositivo arranca con un gran mapa que marcan los países árabes, la proyección de entrevistas a mujeres significativas de la cultura árabe y varios documentales. A partir de ahí, la siguiente sala se adentra en los 'Espacios privados, ámbitos personales' que hace referencia al ámbito de la casa y lo doméstico, un lugar que puede devenir también en cárcel.

El segundo capítulo 'El cuerpo, el deseo, la sexualidad' se adentra en cuestiones como la sexualización impuesta por los colonizadores, los modelos de feminidad/masculinidad o la diversidad sexual. La sección 'Lugares y símbolos de lo público' indaga acerca de los espacios considerados eminentemente públicos, como las calles y las plazas de ciudades, donde debe imperar la convivencia y el respeto mutuo.

Finalmente, la muestra se cierra con 'La historia, sus pliegues y conflictos', que engloba los trabajos de artistas marcadas por los acontecimientos políticos y determinados hechos históricos, y se acerca al temas como la emigración o conflictos el de Israel y Palestina.

La elección de la década de los noventa como arranque de la exposición viene motivada por la aparición de las nuevas tecnologías que facilitan el intercambio de imágenes y el acercamiento de mujeres que viven alejadas. Sin embargo, estas artista ofrece una visión muy "heterogénea" de su cultura, ya que viven "realidades muy distintas" según el país en el que vivan. Algunos ha recrudecido sus políticas de control sobre las libertades culturales, mientras en otros se han producido cambios más aperturistas, ha explicado Aliaga.