Esta evolución, según explica el Ministerio de Hacienda, se debe a un aumento de los gastos no financieros en un 2,5 por ciento frente al incremento de los recursos en un 1,1 por ciento durante los seis primeros meses del año.

En concreto, las autonomías con un mayor nivel de déficit en el primer semestre del año fueron Extremadura (1,26 por ciento) y Murcia (1,16), seguidas de cerca por Cantabria (0,95 por ciento), Comunidad Valenciana (0,93 por ciento), Castilla-La Mancha (0,91 por ciento), Cataluña (0,87 por ciento) y Andalucía (0,82 por ciento).

Les siguen Aragón (0,77 por ciento), Galicia (0,75 por ciento), Baleares (0,74 por ciento), Castilla y León (0,73 por ciento), Asturias (0,64 por ciento), La Rioja (0,64 por ciento), Canarias (0,55 por ciento), Comunidad de Madrid (0,53 por ciento) y Navarra (0,53 por ciento), mientras que el País Vasco (0,01 por ciento) registró prácticamente equilibrio presupuestario.

20 POR CIENTO MENOS

El déficit del conjunto de las administraciones públicas, excluidas las corporaciones locales, se situó en 26.982 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone el 2,32 por ciento del PIB y una reducción del 20 por ciento respecto al 3,01 por ciento registrado en junio de 2016, según los datos del ministerio.

Esta cifra excluye el saldo neto de las ayudas a instituciones financieras, que a finales de junio presenta un importe negativo de 344 millones, según los datos de déficit del conjunto de las administraciones, correspondientes al mes de junio en términos de contabilidad nacional, que años anteriores se publicaban a finales de septiembre.

La administración central registró un déficit de 12.377 millones a finales de junio, lo que equivale al 1,06 por ciento del PIB, excluyendo la ayuda financiera. El saldo de la Administración Central incluye el saldo del Estado, así como el de los organismos de la Administración Central.

En concreto, el déficit del Estado hasta junio es de 12.773 millones, lo que equivale al 1,10 por ciento del PIB. Esta evolución se debe al incremento de los impuestos en un 7,3 por ciento y al descenso del 4,4 por ciento de las transferencias pagadas a otras administraciones públicas.

Asimismo, los organismos de la administración central registran a finales del mes de junio un superávit de 52 millones. Hacienda recuerda que en 2016 el FROB como accionista de la Sareb acudió a la ampliación de capital por importe de 996 millones, sin correspondencia este año.

BAJA EL DÉFICIT DE LA SEGURIDAD SOCIAL

De su lado, los fondos de la Seguridad Social han obtenido un déficit de 6.243 millones hasta junio, equivalente al 0,54 por ciento del PIB. En el conjunto del subsector destaca la evolución de los ingresos por cotizaciones sociales, con un crecimiento del 5,6 por ciento hasta junio, compensando el descenso de las transferencias recibidas del Estado, en un 16,3 por ciento interanual, como consecuencia de la mejora del mercado laboral.

De esta forma, el déficit del subsector disminuye en 0,05 puntos de PIB en comparación con el año pasado, pese al menor superávit registrado en el Servicio Público de Empleo estatal que pasa de 1.507 millones en junio de 2016 a 1.404 millones en junio de 2017.

Esta evolución se debe al descenso de los ingresos, en un 7,3 por ciento, debido fundamentalmente a las menores transferencias corrientes recibidas del Estado para financiar las prestaciones por desempleo (1.514 millones).

Por su parte, el sistema de la Seguridad Social ha reducido su déficit de 7.929 millones en 2016 a 7.661 millones en este año, debido a que el aumento del 3,8 por ciento registrado por los ingresos, hasta alcanzar los 62.908 millones, ha sido superior al 3 por ciento experimentado por los gastos, con un volumen de 70.569 millones.

Por último, el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), mejora sus resultados al pasar de un déficit de 162 millones en junio de 2016 a un superávit de 14 millones en 2017.