El Congreso de los Diputados se pronunció este martes en contra de la reprobación de la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez.

La votación, que se hizo diputado a diputado, se produjo a iniciativa de Izquierda Unida - Iniciativa per Catalunya (IU-ICV), que culpa a la ministra del caos circulatorio registrado en Cataluña.

A excepción del PSC, todo el tripartito votó contra la ministra, al igual que el PP.

En defensa de Álvarez se postularon el PSOE y el Partido Nacionalista Vasco (PNV), así como un par de diputados del grupo mixto.

También estaban en el aire los votos del del Bloque Nacionalista Galego (BNG), socio de los socialistas en Galicia, y de la Chunta Aragonesista (CHA), cuyo único representante no había confirmado que fuera a asistir al hemiciclo.

Al final los diputados de estas dos formaciones se mostraron contrarios a la reprobación de la ministra.

Caos en Cataluña

La petición de recusación para la ministra ha llegado después de los múltiples problemas en las infraestructuras del Estado, especialmente en Cataluña.

En apenas unos meses han sufrido apagones generales, cortes del servicio ferroviario de Cercanías y múltiples problemas derivados de las obras de la línea de Alta Velocidad a su llegada a Barcelona.

La ministra, antes de esta tramitación parlamentaria, se ha mostrado preparada para concurrir a las elecciones y luchar por la "mayoría para Gobernar".

Lo único que ha declarado al respecto es que, como ya dijo, no piensa dimitir, sino que quiere terminar "lo empezado" e intentará hacer "lo mejor posible el mandato del presidente".

"Estoy francamente orgullosa del trabajo desarrollado independientemente de que se han producido cuestiones concretas que han producido molestias a los ciudadanos", ha añadido.

El portavoz del Partido Socialista en el Congreso, Diego López Garrido, había señalado antes de la votación de la reprobación a la ministra que responde a razones "básicamente electorales" que carecen de "fundamento objetivo".

Del mismo modo, desde la cúpula del PSOE han ironizado con el hecho de que el PP vote junto a fuerzas como IU o ERC, a las que tanto ha criticado durante toda la legislatura.