El diputado general de Álava, Ramiro González (PNV), ha advertido de que el mes de septiembre será "definitivo" para determinar el alcance de la reforma fiscal que preparan las instituciones forales de Euskadi, por lo que ha emplazado al PP y EH Bildu a dejar de "marcar perfil" y a "negociar con realismo" los posibles cambios tributarios.

González se ha referido, en una entrevista concedida a Europa Press, a la posición que mantienen el Partido Popular y EH Bildu ante la reforma fiscal que preparan las tres diputaciones vascas, con el objetivo de "garantizar" la financiación de unos servicios públicos "de calidad" y de contribuir a la "competitividad" de las empresas.

En el caso de Álava -y a diferencia de lo que ocurre en Bizkaia y Gipuzkoa, donde el PNV y el PSE-EE gobiernan en coalición con mayoría absoluta- el Ejecutivo de 'jeltzales' y socialistas necesita llegar a un acuerdo con el PP o EH Bildu -principales fuerzas de la oposición- para garantizarse la aprobación de la reforma tributaria.

Por ese motivo, González ha emplazado a ambas formaciones a que dejen de "marcar perfil" y se impliquen en una negociación desde una postura "realista".

En el caso del PP, que supedita su apoyo a una modificación tributaria a que esta contemple una bajada de impuestos, ha censurado que esta posición "no está pegada a la realidad". Además, ha recordado que se trata de una posición que el PP "no mantiene en el resto del Estado". De hecho, ha subrayado que las medidas que impulsa el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, van "en el sentido contrario".

COMPETITIVIDAD

Además, ha reclamado al Partido Popular que si lo que pretende es reducir los presupuestos públicos, "antes debería explicar qué es lo que quiere recortar". "¿Quiere recortar en educación, en sanidad o en medidas para la recuperación económica?", se ha preguntado.

El diputado general de Álava también ha censurado la actitud de EH Bildu, que entre otras medidas plantea incrementar la presión fiscal efectiva que se aplica a los beneficios de las empresas.

González considera que de imponerse las tesis de la coalición soberanista, Álava "dejaría de ser competitiva en el mercado global y europeo".

MERCEDES

El jefe del Ejecutivo alavés también se ha referido a la repercusión que pueden tener los cambios organizativos aplicados por la empresa Mercedes Benz, cuya planta de Vitoria es la empresa más importante del territorio. El impacto negativo de estos cambios organizativos en la recaudación de la Hacienda alavesa podría llegar a los 200 millones de euros.

González ha recordado que las instituciones vascas y el Gobierno central están abordando este asunto en el marco de un grupo de trabajo específico.

Ambas partes -según ha dicho- comparten la opinión de que unos cambios administrativos en una empresa, que no afectan a la producción de la misma, "no deben tener un impacto de ese orden" en la recaudación del territorio en el que se ubica dicha compañía.

Por ese motivo, ha mostrado su confianza en que este grupo de trabajo encuentre "una solución" antes del 30 de septiembre, que es la fecha que se fijó inicialmente para resolver este problema.

EXCEPCIONES

El diputado general de Álava se ha referido a los problemas por los que atraviesan algunas importantes empresas de este territorio y del resto de Euskadi. Pese a la gravedad de los problemas de algunas de estas compañías, ha subrayado que se trata de "excepciones", dado que la tendencia y los datos globales de la economía vasca son "claramente positivos".

Entre otros indicadores, ha citado el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), la evolución de las exportaciones, el Índice de Producción Industrial (IPI), el incremento de la afiliación a la Seguridad Social o la reducción del número de personas desempleadas.

González ha concedido una especial relevancia a la mejora en la recaudación por el IRPF, cuyo crecimiento interanual supera el cinco por ciento. Esto -ha indicado- evidencia que "el empleo y la masa salarial están creciendo de forma significativa".

SALARIOS

En este sentido, ha insistido en su llamamiento a que las empresas que se lo puedan permitir mejoren las condiciones laborales y salariales de sus empleados.

"Es verdad que las empresas lo han pasado muy mal, que algunas no han aguantado y que algunos empresarios han pagado las consecuencias de la crisis con su patrimonio personal; pero también es verdad que la situación está cambiando desde hace algún tiempo, y que las empresas están entrando en beneficios", ha manifestado.

Por ese motivo, ha afirmado que "de la misma manera que los trabajadores han sufrido de manera importantísima la crisis, no sólo yendo al desempleo; sino en muchos casos, viendo deterioradas sus condiciones laborales y salariales, es momento de que esa situación se revierta".

González ha reconocido que algunas empresas han mantenido unas condiciones laborales "más que aceptables" pese a la crisis económica, pero ha señalado que es necesario que "el conjunto de las empresas que tienen beneficios" apliquen una mejora "paulatina" de las condiciones de trabajo y salarios de sus plantillas.

El diputado general de Álava ha subrayado que la competitividad de las empresas vascas "no se puede basar en el precio", sino que debe articularse en torno a "la innovación y la calidad", las cuales -ha subrayado- no se pueden lograr sin unas adecuadas condiciones laborales.