Los últimos efectivos abandonarán la semana que viene la sede de la calle Easo, que será clausurada. De este modo, finalizará el traslado de la Policía local donostiarra a su nueva sede donde ya operan desde hace meses buena parte de sus operativos.

De este modo, a partir del martes, todos los servicios relacionados con este Cuerpo se ofrecerán en Morlans. Únicamente se atenderá en Easo hasta el mismo 31 para las cuestiones relacionadas con objetos perdidos, pasando también este servicio a Morlans a partir del 1 de septiembre.

El traslado de la Policía municipal a Morlans comenzó en 2016 y el edil de Seguridad del Ayuntamiento donostiarra, Martin Ibabe, ha asegurado que las nuevas instalaciones permiten "disponer de más espacio y medios técnicos más avanzados, lo que redunda en un mejor servicio al ciudadano".