Según informa la organización sindical en una nota, desde que se tuvo conocimiento "de los incumplimientos de esta empresa en materia laboral, especialmente en lo referente al pago de las nóminas", tal extremo fue denunciando "periódicamente ante la Inspección de Trabajo y ante el Ayuntamiento de Camas.

En ese contexto, desde UGT han recordado que al hilo de ello, se convocaron cinco huelgas entre los años 2012 y 2015 y seis concentraciones entre 2012 y 2014. El sindicato recuerda además que

presentó más de ocho denuncias ante la Inspección de Trabajo entre los años 2011 y el presente 2017, en las que se reclamaba la actuación inspectora a tenor de "impagos de nóminas y retrasos continuos en las fechas de pago de las mismas, al igual que incumplimientos con respecto al abono de garantías".

"Estas denuncias sirvieron para que la Inspección de Trabajo realizara los correspondientes requerimientos a la empresa", han subrayado desde el sindicato, que entiende "que la situación ha llegado a un punto en el que, como bien argumenta el propio Ayuntamiento de Camas, hay que tomar medidas".

Para UGT, estas medidas "se han demorado innecesariamente" y se ha generado una situación de "precariedad laboral" para unas trabajadoras que la vienen arrastrando "desde hace siete años".