Europa, frente a la estrategia yihadista "de los mil cortes"

Efectivos policiales en el lugar del ataque en las Ramblas de Barcelona.
Efectivos policiales en el lugar del ataque en las Ramblas de Barcelona.
Andreu Dalmau / EFE
Efectivos policiales en el lugar del ataque en las Ramblas de Barcelona.

Atentados como los de Cataluña son muy fáciles de organizar, muy difíciles de evitar y muy provechosos para los yihadistas por su relación entre el coste y la efectividad, según apuntan expertos.

La estrategia utilizada es conocida como "de los mil cortes" porque busca debilitar poco a poco al considerado enemigo por los terroristas de tal manera que cualquiera pueda cometer estos ataques: agentes infiltrados, los retornados de Siria o Irak, simpatizantes autorradicalizados o incluso enfermos mentales.

Después de los atentados de Niza, Berlín, Londres y Estocolmo, todas las capitales así como las ciudades más turísticas del Viejo Continente han invertido en dispositivos fijos para evitar ataques con vehículos. Pero esto no es suficiente ya que es muy fácil evitarlos por parte de los extremistas.

"Es el principio de los objetivos blandos", explica a la AFP Frédéric Gallois, exjefe de las fuerzas de élite francesas GIGN. "Cualquier concentración de civiles es un objetivo. Y hay miles de concentraciones de multitudes".

"En la medida de lo posible los terroristas escogen objetivos blandos pero con un alto grado de connotación simbólica, como los Campos Elíseos o Las Ramblas, pero si estos lugares están bien protegidos, como comienza a ser el caso, pueden atacar una calle aledaña", explica.

"En Roma, si no pueden acercarse a la plaza San Pedro pero sí por ejemplo lograr matar a una docena de personas en una calle próxima, habrían conseguido atacar Roma y el Vaticano. El valor simbólico sería el mismo", estima.

Estos ataques, calificados de "terrorismo low-cost", o de "bajo coste", han sido preconizados desde hace tiempo por los grupos yihadistas. Primero por Al Qaeda en su propaganda de principios de los años 2000, y después por el grupo Estado Islámico.

Sencillez y efectividad

EI llama a sus soldados llama a "utilizar cualquier medio a su disposición, un vehículo, un cuchillo o una piedra", indica Gallois, por lo que "se multiplica la capacidad para pasar al acto. No necesitan ningún tipo de formación".

Frente a esta amenaza imposible de neutralizar completamente en un futuro cercano y que aumenta con el regreso a de cientos de yihadistas de Irak y Siria, los responsables políticos deben enseñar a las democracias europeas a resistir.

Los grupos terroristas ya no buscan cometer atentados grandes sino frecuentes para debilitar a quien consideran enemigo. La consigna es "pensar a largo plazo y ser regulares", esgrimen los especialistas.

"Debemos mirar la realidad de frente. Hacer creer a la gente que prohibiendo la entrada de musulmanes (...) o cerrando mezquitas se resolverá el problema es mentirles. Al contrario, esto refuerza los argumentos del Estado Islámico", dijo recientemente a la AFP la senadora francesa Nathalie Goule, quien copreside la comisión de investigación sobre la lucha contra las redes yihadistas.

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