El conflicto que la empresa Eulen, adjudicataria de los servicios de seguridad del aeropuerto barcelonés de El Prat, mantiene con los trabajadores ha provocado que esta madrugada y esta mañana se hayan producido colas que superaban la hora de espera (hasta los 75 minutos) y que las colas hayan llegado hasta el exterior de las zonas de facturación y control de seguridad.

La anticipación de los usuarios, alertados por la complicada situación en el aeropuerto, propicia que las hora punta, la de mayor afluencia, se produzca entre las 5.00 y las 6.00 horas de la mañana.

Este viernes, después del primer tramo de una hora de paros, que ha finalizado a las 6.30 horas, la situación ha tendido a normalizarse, con esperas de 40 minutos a las 7.00 horas, que a las 7.30 ya han sido inferiores a los 20 minutos. A las 8.00 horas se han visto colas más largas para facturar maletas que para pasar los filtros de seguridad, producidas por la antelación con la que han venido los pasajeros por miedo a perder el avión.

La situación se ha reproducido a las 9.00 horas, cuando las terminales se han masificado , generando más colas en facturación y en seguridad. No obstante, durante la mañana las colas han sido ya más intermitentes y menos intensas. Los próximos paros de una hora se producirán a las 16.30 y a las 19.30 horas en una jornada con 524 salidas y 83.660 asientos ofertados, según informa Aena.

Los trabajadores de Eulen mantienen la huelga parcial convocada para este viernes en el Aeropuerto de El Prat después de que la plantilla votara en asamblea rechazar la propuesta de la Generalitat -aceptada por la empresa-, y optara mayoritariamente por reclamar un incremento salarial superior al ofrecido, de 200 euros por 12 mensualidades.

Tras la votación de los trabajadores de Eulen, se vivirá la cuarta jornada de paros en el Aeropuerto de Barcelona, después de los que se realizaron el viernes y domingo de la semana pasada y también el pasado lunes.

La huelga parcial está convocada para este viernes y el domingo, con paros de una hora a las 5.30, 10.30, 16.30, y 18.30, mientras que a partir del lunes está convocada una nueva huelga, en este caso del 100% de la jornada y todos los días.

La Delegación del Gobierno en Cataluña ha fijado en el 90% los servicios mínimos durante la huelga indefinida convocada a partir del 14 de agosto por los empleados de Eulen en el Aeropuerto de Barcelona-El Prat, algo que de cumplirse dejaría prácticamente sin efecto el derecho a la huelga de los trabajadores.

El Gobierno, tras la primera reunión del comité de crisis de esta mañana, ha anunciado que aumentará desde el lunes el despliegue de la Guardia Civil en el aeropuerto, para garantizar la seguridad de los pasajeros y evitar el actual caos. Por la tarde, llegará la reunión con representantes de la Generalitat y del Ayuntamiento.

Los empleados podían votar el jueves entre cinco opciones: la propuesta mediadora de la Generalitat, aceptada por Eulen, que ofrecía una subida de 200 euros en 12 pagas; otra de 200 euros por 15 pagas; 250 euros por 12 pagas, 250 euros por 15 pagas o 350 euros también por 15 pagas, y han optado mayoritariamente por la cuarta -250 euros por 15 pagas-.

En la votación participaron 176 trabajadores de los 350 que tiene Eulen en los filtros de seguridad del Aeropuerto de Barcelona.

La opción ganadora, la de un complemento de 250 euros por 15 pagas, ha obtenido 89 votos; seguida muy de cerca por la opción de 200 euros por 15 mensualidades (82 votos), mientras que la propuesta de la Generalitat y de Eulen ha recibido dos votos, y la opción de un complemento de 250 euros por 12 mensualidades ha obtenido tres apoyos; la opción más alejada, de 350 euros por 15 pagas, no ha obtenido ningún voto.

El comité de huelga había manifestado que estaba mayoritariamente a favor de la segunda opción, de 200 euros por 15 mensualidades -la segunda más votada-, lo que suponía acercarse a la oferta de la empresa y una rebaja importante respecto a las condiciones exigidas inicialmente, ya que reclamaban que el complemento salarial fuera de 350 euros por 15 pagas, que finalmente no ha recibido ningún apoyo.

Así, finalmente, la mayoría de los vigilantes han optado por seguir negociando con la empresa para lograr un incremento salarial de 250 euros mensuales repartidos en quince pagas.