La Policía Nacional detuvo a estos dos individuos que marcaban con trozos de plástico transparente las puertas para identificarlas y comprobar si estaban vacías.

Del mismo modo, el pasado martes también se detuvo en la capital hispalense a un joven al que se investiga por robos en cuatro viviendas usando el método del escalo, que consiste en trepar por la fachada hasta acceder a la vivienda por un balcón o ventana.

Por su parte, la OCU ha recomendado en un comunicado no olvidar echar la llave al salir de casa, dejar señales que hagan pensar que la casa no está vacía especialmente en vacaciones como ropa tendida o persianas entreabiertas. Igualmente, ha sugerido no publicar en redes sociales las ausencias por largos periodos de tiempo, así como ha apuntado que, si se desconecta la corriente eléctrica, es apropiado que el timbre siga funcionando.

No obstante, esta organización ha recordado que las medidas "más eficaces" para evitar y disuadir a los ladrones son tener la puerta blindada o acorazada, una alarma, un perro guardián y rejas en las ventanas.

ANDALUCÍA, TERCERA COMUNIDAD EN HURTOS

Asimismo, dicha organización recientemente ha realizado una encuesta que "revela que Andalucía es la tercera comunidad autónoma donde más robos se producen, precedida de Madrid y Castilla-La Mancha".

Según dicha encuesta, un seis por ciento de los hogares españoles ha sufrido un intento de robo en los últimos cinco años. De ellos, la mitad acabó en un robo en los que el valor medio de lo sustraído alcanzó los 3.270 euros, estas cifras "son bajas" en comparación con países como Italia o Bélgica donde el 13 por ciento de las casas ha sufrido un intento de robo en los últimos cinco años.

Aunque la gran mayoría de los afectados denunció el robo a la policía, en el 74 por ciento de los casos no se consiguió identificar a los ladrones, un 60 por ciento de las denuncias se ha cerrado sin ningún resultado y en el 8 por ciento de los casos se recuperó lo robado total o parcialmente.

El estudio de la OCU ha señalado que en España las familias gastan una media de 1.974 euros en medidas de seguridad, así, los datos demuestran que lo "mejor" para aumentar la protección de los hogares es una combinación de las distintas medidas junto con una actitud preventiva. "La instalación de una alarma profesional combinada con otras medidas de seguridad como la puerta blindada y las ventanas oscilobasculantes reducen hasta quince veces la probabilidad de sufrir un robo", ha informado la organización en su comunicado.

"Aun contando con todas las medidas de seguridad disponibles, siempre es necesario mantener una actitud preventiva", porque incluso si no existe la posibilidad de instalar ninguna medida de seguridad, mantener una actitud precavida reduce a la mitad el riesgo de robo respecto al de aquellos hogares en los que la actitud es más imprudente.